Reforma tributaria: un nuevo golpe a la inversión

28 / 02 / 23 Por: Omar Vargas Bahamonde, Presidente Cámara Chilena de la Construcción Punta Arenas
cchc-Reforma tributaria: un nuevo golpe a la inversión

Desde fines de 2019 hemos experimentado como país una crisis social, sanitaria y económica. El sector de la construcción ha sido fuertemente impactado, lo que ha provocado alzas de costos de construcción, quiebras de empresas, pérdidas de empleo, etc. En los últimos meses, este escenario ha tendido a mejorar, gracias a una serie de medidas estatales, como los reajustes a contratos de vivienda e infraestructura en ejecución.

Sin embargo, aún quedan fuera de esos reajustes obras menores y el panorama para este año se muestra bastante negativo, con una caída de la inversión y bajo crecimiento. Es en este contexto en el que se presenta el proyecto de ley que introduce importantes reformas al sistema tributario.

En su esencia, la reforma busca recaudar más ingresos, a través del aumento de carga tributaria a los dueños de empresas. Por lo tanto, la reforma tributaria impactará transversalmente a la industria de la construcción, tanto a grandes como pequeñas y medianas empresas.

Una de las medidas más importantes de la reforma es la desintegración tributaria, que en palabras simples se podría describir como la doble tributación, es decir, pagar impuestos como empresa y como persona natural. La creación del Impuesto a las Rentas del Capital supone que la totalidad de las ganancias que genera una empresa termina siendo renta para sus dueños (socios y/o accionistas), situación que en la práctica no ocurre así, dado que socios y/o accionistas no reciben el 100% de las ganancias porque destinan un porcentaje al ahorro o reinversión en la empresa para que aumente su producción y/o aborde nuevos proyectos, creando así más empleo y dinamizando la economía.

Así, la desintegración tributaria afectaría a las grandes empresas, que en el sector de la construcción son sólo el 2%, las responsables del 53% del empleo sectorial. En momentos de crisis económica, los recursos propios de las empresas son fundamentales para la continuidad operacional y para crear nuevos proyectos para generar empleo. Este nuevo régimen tributario afectará gravemente a la inversión y por ende la economía del país.

Para las pymes, se propone el régimen tributario especial vigente, pero existen múltiples empresas pequeñas del sector de la construcción que no podrán acogerse a dicho régimen, dado que facturan más de 75.000 UF al año, a pesar de los altos costos y bajos márgenes que obtienen.

El proyecto de Reforma Tributaria también plantea que cada año las empresas ya no podrían usar hasta el 100% de las pérdidas tributarias que hayan registrado en ejercicios anteriores para rebajar su renta líquida imponible (RLI) de ese año, tal como se puede hacer en la actualidad, sino que solo podrían usar hasta un máximo del 50% de dichas pérdidas.

Esta medida también repercute especialmente al sector de la construcción, dado que las empresas del rubro incurren en pérdidas al iniciar proyectos para luego recuperarse al término de la faena. La limitación de uso de perdidas traerá importantes consecuencias: una caída de la rentabilidad de los proyectos y una severa disminución de la competencia en el sector, lo que desincentiva fuertemente la inversión y el desarrollo de proyectos de mediano plazo.

Como Cámara Chilena de la Construcción Punta Arenas siempre nos enfocamos en impulsar el bienestar de nuestros trabajadores y aportar al desarrollo de la región. Por ello, advertimos que esta reforma tributaria propuesta significa un golpe fuerte al futuro del emprendimiento en nuestra región, ya que podría dificultar la continuación de empresas de la zona y la creación de otras nuevas.

Como gremio de la construcción proponemos un cambio de enfoque de la política pública, priorizando medidas que impulsen principalmente la inversión privada, dado su potencial para generar actividad, crear empleo, aumentar los ingresos fiscales y asegurar un desarrollo inclusivo y sostenible.