Mejorar la calidad de vida en Copiapó

La calidad de vida de Copiapó dependerá de la capacidad que tengamos para superar y aprovechar las oportunidades que generan las barreras urbanas que impiden el desarrollo de la comuna. En un diagnóstico realizado por la Cámara Chilena de la Construcción hace 17 años detectamos un número importante de estas situaciones que impiden el avance de la capital regional.

En la oportunidad, el lecho del río era un basural, que impedía la integración entre ambas riberas; hoy con la construcción de Parque Kaukari, este sector se está convirtiendo en una hermosa fachada que ha integrado y comunicado a toda la comuna. Este es un ejemplo del tipo y magnitud de obras que se requieren para mejorar el bienestar de las personas, obras de largo plazo, obras de estado, obras que traspasen gobiernos.

De igual manera como se asumió la construcción del Parque Kaukari, debemos abordar con decisión e inspiración el resto de los desafíos. En ese sentido, planteamos el traslado de la nueva fundición y refinería de Enami al sector de Llano Seco, zona destinada según el Plan Regulador para la instalación de industrias de este tipo, pues presenta mayores atributos para su instalación; a solo 15 kilómetros de Copiapó, con enlace a la ruta 5 norte, presencia abundante de recurso eléctrico sustentable, factibilidad de agua potable e industrial de origen oceánico, conexión inmediata a ferrocarriles y a todos los puertos de la región, además de proximidad al aeropuerto Desierto de Atacama, entre otros.

Sin embargo, se insiste en mantenerla en el mismo lugar, o sea, en el futuro centro de la conurbación Copiapó-Tierra Amarilla. Con esto, a pesar de construirse una fundición moderna, seguirá siendo una barrera que afectará el desarrollo urbano.

Otra situación que se debiera analizar es el emplazamiento del Regimiento en una zona céntrica de la comuna, que propusimos se trasladara para dar cabida a actividades de desarrollo intelectual, investigación y desarrollo de la inteligencia, junto con un parque, generando una zona de infraestructuras destinadas al estudio y la transferencia tecnológica.

Por otro lado, la presencia de pasivos mineros compuestos por relaves y escorias también representa una barrera ecológica para el desarrollo de una buena calidad de vida de nuestros habitantes; las zonas céntricas de la ciudad que se encuentran degradadas y en algunos casos deshabitada, sin duda, también lo son.

Por último, señalar que el territorio que ocupaba el paso de la línea de ferrocarriles, una franja continua de 10 metros de ancho, hoy sucia y abandonada, nos da la oportunidad de construir un tranvía que transcurra longitudinalmente desde Paipote hasta la UDA, generando un sistema de locomoción pública alimentado por buses eléctricos y colectivos, que junto con descongestionar las calles y ofrecer seguridad y certeza a sus usuarios, generaría una notable mejoría en la calidad de vida de la comunidad.

Antonio Pardo Kallens
Vicepresidente CChC Atacama