Los desafíos que nos deja el ICVU

Como parte fundamental del calendario de actividades de la Semana de la Construcción, el gran evento que reúne a nuestro sector a nivel nacional, se han dado a conocer los resultados del Índice de Calidad de Vida Urbana (ICVU), elaborado por el Núcleo de Estudios Metropolitanos de Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la Pontificia Universidad Católica (PUC) y la Cámara Chilena de la Construcción.

Al volver la mirada a nuestra zona, observamos que Chillán ocupa el lugar número 51 en el ranking (son 93 las comunas analizadas), con un ICVU de 40,1 puntos, descendiendo 15 puestos en comparación al año 2015; por su parte, San Carlos alcanza el puesto 57 con un ICVU de 38,2 puntos, bajando 6 puestos en comparación al año pasado; en tanto, Chillán Viejo se queda con el lugar 63 del ranking, con un ICVU de 37,5 puntos, subiendo 6 puestos en comparación a 2015, sin embargo al tomar como referencia los valores del promedio nacional, la comuna se encuentra en el rango inferior del índice de calidad de vida. En tanto, los resultados del análisis de la intercomuna no resultan más positivos, pues dejan al territorio en el penúltimo lugar, reflejando un descenso de un puesto en relación al año pasado.

Sin duda, la primera reacción trae preocupación y deja deslizar un sentimiento de desazón al no observar un avance sostenido en las variables involucradas con la calidad de vida urbana, que más allá de cifras se refiere al bienestar que sienten las personas que construyen este territorio. Entonces las preguntas son ineludibles: ¿qué falta para mejorar?, ¿dónde se han cometido errores?, ¿por qué no podemos dar nuevos pasos en torno a la calidad de vida?, ¿qué necesitamos hacer?

Sin embargo, no debemos caer en el pesimismo, debemos entender que estudios como el ICVU nos invitan a reflexionar y establecer un punto de inflexión que nos permita encontrar alternativas para hacer frente a esta situación actual. Estamos ante un gran desafío que requiere el trabajo mancomunado de los sectores público y privado junto a una activa participación de la comunidad.

Entendiendo las particularidades de cada lugar debemos analizar cómo fortalecer el mercado laboral en Ñuble, las alternativas para optimizar la infraestructura urbana y atraer una mayor inversión, todos aspectos que entreguen mayores proyecciones, sobre todo considerando que en nuestro futuro se asienta el proyecto de ser región.

Sin duda, un estudio a nivel nacional tan relevante como el ICVU, que refleja además nuestro compromiso como gremio con el progreso del país, invita a imponernos nuevas tareas y metas. El desarrollo y una mejor calidad de vida se encuentran en las manos de todos.

Ariel Larenas del Valle

Presidente CChC Chillán