Industrialización 4.0: “La otra emergencia”

por Ricardo Salman, presidente CChC Chillán

Para que el déficit habitacional en Chile no aumente y se mantenga al menos, en los altos niveles en que ya está, se requiere producir 40 mil viviendas al año. Una vez cumplida la meta del gobierno -260 mil- habremos bajado esta brecha en 100 mil.

Sobre las estimaciones del déficit no hay cifras recientes, datan del año 2017, y según éstas, sumadas a las de campamentos, se estima en 641 mil las familias carentes de una solución habitacional a nivel país.

Por otro lado, sí se conocen las cifras de familias inscritas en el registro del Serviu de postulación al subsidio de vivienda en propiedad y en arriendo en Chile, son 1,2 millones y en Ñuble 31 mil familias, 24.000 en propiedad y 7.000 en arriendo.

Sin duda que con estos datos tardaríamos muchos años en resolver el problema habitacional de las familias, por ello, por ambiciosa que sea la meta, se requiere un esfuerzo mayor y en esto puede ser fundamental y constituirse en un gran aporte, el proceso de industrialización de vivienda en madera, tema tratado en un seminario, liderado por el Gobierno Regional y la Universidad del Bío Bío y apoyado por la Cámara Chilena de la Construcción en Ñuble.

La industrialización 4.0 debe tomar la fuerza de una segunda industria, constituyéndose en otro pilar de desarrollo para la región y de soluciones habitacionales tanto para nuestra zona, como para el país.

Se requiere avanzar más en prefabricación en un medio controlado, avanzando en eficiencia, optimizando procesos y disminuyendo pérdidas, mejorando la seguridad para los trabajadores y ganando productividad. La industrialización es un concepto que busca avanzar en el proceso de eficiencia energética, llevando a una mayor producción con un ahorro de recursos.

Cómo región y como país somos una potencia en la industria de la madera, corresponde a la principal exportación de nuestra región - cerca del 70% - bien valdría la pena dejar parte de ella en el territorio nacional, con un mayor valor agregado y generación de empleo, y aportando con una solución al déficit habitacional.

Para la partida de esta industria, socialmente rentable, es necesario una cuantiosa inversión en infraestructura productiva, que fusione nuevas tecnologías con maquinarias, equipos y capital humano. Tenemos que dar el salto de la construcción convencional, a la construcción panelizada o a la construcción modular o 3D, en que lo que realizamos en obra, después de la urbanización es el montaje, en menor tiempo - un ahorro de un 30% - y con mayor seguridad.

La industrialización viene siendo tomada en cuenta ya desde el año pasado por el Plan de Emergencia Habitacional, habiendo realizado dos llamados. También Corfo apoyó con beneficios a 22 empresas en Ñuble para que avancen en los procesos de industrialización.

Esta tendencia y buena coordinación que vimos el 2022 hay que profundizarla este año. Será la mejor manera de apoyar al Plan de Emergencia del gobierno y de cumplir la meta puesta por el Gobernador Oscar Crisóstomo en dicho seminario de construir y entregar 10 mil viviendas para la región en los próximos 3 años, con más industrialización que permitirá junto con entregar soluciones a las familias, tener un uso eficiente de la energía, mayor prevención de residuos y emisiones, reutilización del agua, entre otros.

Al adoptar la Industrialización 4.0, generamos un proceso que mediante las certezas derivada de la mayor precisión, planificación y tecnología que tenemos en una planta, nos lleva a bajar los costos.

Hoy tenemos la emergencia de adoptar más Industrialización por el presente y futuro de nuestra Región de Ñuble.