Estamos preparados

La crisis sanitaria es incierta, y ante la imposibilidad de superarla en el corto plazo, debemos adaptarnos y responder del mejor modo posible, para controlar el riesgo de contagios de manera óptima. En este contexto, como Cámara Chilena de la Construcción hemos elaborado y aplicado un protocolo sanitario desde el inicio de la pandemia, que se ha ido adecuando a los distintos requerimientos, y reforzando sus medidas a tal nivel, que hoy podemos decir con propiedad que somos una industria clave, segura y reactivadora.

En esas tres características radica nuestro enfoque actual, entendiendo en primera instancia que la seguridad de nuestros trabajadores no se puede tranzar y que, así como valoramos el rol que cumplirán para levantar a nuestro país, tenemos conciencia absoluta de lo prioritaria que es su protección. Por eso, a través del constante monitoreo al cumplimiento de medidas sanitarias y, en nuestro caso, de la adhesión de todos los socios de la CChC Calama a esta herramienta, podemos conjugar la continuidad operacional, con el cuidado y la estabilidad de cada uno de nuestros colaboradores.

Por lo mismo valoramos el Plan de Subsidios al Empleo anunciado recientemente por el Gobierno. Sabemos que es urgente recuperar los cientos de miles de puestos de trabajo que se han perdido en el país, y que para concretar ese objetivo es fundamental la reactivación de cada sector productivo. Por ello insistimos en el llamado a nuestras autoridades a concretar los anuncios de reanudación de obras en nuestra Provincia de El Loa, y a revisar el estado de iniciativas detenidas, como el emblemático proyecto Borde Río, o el terminal rodoviario, que por estos días define la continuidad de su empresa ejecutante.

Al mismo tiempo, reiteramos a nuestras mandantes mineras la importancia de respetar lo pactado, pues dar cumplimiento a los diferentes contratos de proveedores, es también una forma directa de reactivar la economía local, garantizando empleo a pymes y trabajadores de nuestra ciudad.

Estamos preocupados por los altos índices de cesantía de la Región de Antofagasta, que llegan a tal nivel, que un estudio reciente publicado por este mismo medio, da cuenta de que la falta de empleos es una de las principales causas de insatisfacción de nuestros habitantes. Por ello, y porque empatizamos con las familias que padecen las consecuencias más negativas de la pandemia, nos hemos preparado para desempeñar un rol clave y protagónico en las etapas venideras.