Errores costosos

26 / 04 / 21
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Como es de público conocimiento, la semana pasada a través de este mismo diario emitimos una Declaración Pública donde manifestamos nuestros reparos y total preocupación respecto a las irregularidades presentadas en el proyecto habitacional Canal Darwin 1 y 2 que se busca emplazar en el sector alto de la capital regional.

En la publicación, fuimos claros en exigir mayor profesionalismo y rigurosidad por parte de la Dirección de Obras Municipales de Coyhaique al momento de aprobar proyectos propios dada la negligencia cometida con este proyecto en particular, debido a que la Entidad Patrocinante Municipal elaboró, revisó y perseveró en errores de diseño que a la postre terminaron en la inviabilidad del mismo, afectando directamente a las familias que anhelan con prontitud el sueño de la casa propia, ponen en riesgo la estabilidad financiera de las pequeñas y medianas empresas y, atentan contra la reactivación económica.

Como antecedente, es preciso poner sobre la mesa que, durante el proceso de las sucesivas licitaciones, las empresas hicieron ver en la etapa de consultas los graves errores de diseño que presentaba el proyecto al no considerar el tamaño real del terreno donde se busca construir las viviendas, el cual no coincide con lo diseñado. Esto último, resulta al menos impresentable. Por lo mismo, el gremio siempre se ha mostrado crítico cuando se trata de construcciones que tienen impacto social como lo son los conjuntos habitacionales que benefician y mejoran la calidad de vida de las familias más vulnerables.

Con esto, buscamos desvelar una mala práctica que ha mostrado la municipalidad de Coyhaique, particularmente, a través de la Entidad Patrocinante en la elaboración de proyectos para comités habitacionales. La guinda de la torta fue este problema que hace más de dos años vienen retrasando las obras de ejecución del Canal Darwin 1 y 2. Además, aquí estamos hablando de 39 familias que por diversas razones tienen sus subsidios adjudicados pero la Entidad Patrocinante Municipal no ha podido echar andar el proyecto producto de una serie de deficiencias que a estas alturas son insalvables.

Ahora, el proyecto está en manos de Serviu, organismo técnico que deberá reformular el mismo, lo que implica nuevos gastos en diseño y en ingeniería tras una evidente falta de capacidad para administrar y resguardar eficientemente los recursos públicos destinados para este proyecto que pertenecen a todas y todos los chilenos.

En tiempos difíciles, y tal como lo manifestamos en la Declaración Pública, resulta especialmente indispensable actuar bajo el principio de prolijidad y buen criterio, dado que las decisiones que se adoptan, sobre todo si estas carecen de sustento técnico y profesional, traen consigo repercusiones adversas y, en algunos casos, hasta irreparables.

Por lo tanto, se deben tomar cartas en el asunto para que este tipo de situaciones no se vuelvan a repetir en un futuro cercano y avancemos hacia la eficiencia en la gestión de manera tal de responder en tiempo y forma las necesidades de la ciudadanía.