El Desafío de una Nueva Etapa

La CChC Chillán ha vivido uno de los hitos claves dentro de su historia: la ratificación de una nueva directiva que guiará la labor gremial por los próximos dos años, tarea que me corresponde liderar con un profundo compromiso.

Se trata de un desafío no menor, pues ha dejado la presidencia nuestro socio Ariel Larenas, quien llevó adelante una destacada gestión definida por la dedicación, la responsabilidad junto a una visión certera y eficaz que permitieron escribir una etapa de gran desarrollo para nuestra Sede.

Es innegable que nos han dejado una vara muy alta, pero tomamos la posta del liderazgo con fuerza y convicción, pues tenemos la certeza que trabajando de manera conjunta seguiremos avanzando y cosechando logros. En este sentido, el primer objetivo es seguir con la labor de los presidentes que me antecedieron y los lineamientos definidos por la Cámara a nivel nacional dando con ello continuidad y fortaleza a nuestra visión como gremio.

Sabemos que no nos encontramos en un momento auspicioso. Al escenario de incertidumbre que han generado las reformas se suma un pulso económico poco favorable. Así lo confirmó hace unos días el informe de Macroeconomía y Construcción dado a conocer a nivel nacional por la Cámara, el cual proyecta un crecimiento anual prácticamente nulo de la inversión en construcción este 2016 con una cifra de 0,1%. A ello se suma la disminución de los ingresos familiares, mayor desempleo, más restricciones de acceso al crédito y un creciente pesimismo empresarial y de los consumidores lo que dibuja un panorama aún más desfavorable. Sin embargo, la historia nos ha demostrado que los tiempos de crisis son aquellos más fructíferos, ya que requieren de la innovación y la visión para dar paso a un verdadero cambio. Por ello, de esta misma adversidad tomaremos la fuerza para salir adelante con acciones que sean un aporte e impliquen nuevas oportunidades.

A su vez, como nueva Mesa Directiva nos hemos planteado impulsar iniciativas que sigan aportando al crecimiento como la creación de la Comisión de Educación, que plasme un renovado eje de acción con las entidades educativas de la zona; consolidar el análisis crítico de la infraestructura considerando el desafío de la nueva Región de Ñuble; y fortalecer la labor de la Comisión de Urbanismo con temas tan fundamentales como el patrimonio y el análisis de los instrumentos de planificación comunal. Además, no podemos olvidar que nos encontramos en tiempo de celebración para nuestro gremio con la conmemoración de los 65 años de su historia; y también a nivel local, pues estamos próximos a cumplir ocho años desde el momento oficial de la creación de la entonces Delegación Regional Ñuble.

Nuestro compromiso es profundo y lo he ratificado junto a los vicepresidentes y consejeros regionales desde el momento de asumir este liderazgo dentro de la CChC Chillán, que gracias al trabajo y voluntad de cada uno de sus socios se ha convertido en un referente y un actor social fundamental.

Claudia Rigall Gallegos

Presidenta CChC Chillán