AVANCES, DESAFÍOS Y EL CRUCIAL ROL DE LA MUJER EN LA CONSTRUCCIÓN

Por Adriana Terán, presidenta Cámara Chilena de la Construcción Maule

Todos los años, en el mes de abril, nos reunimos con los socios y socias de la industria de la construcción en lo que denominamos “Inicio del Año Gremial”, momento en el que hacemos un balance entre los logros y avances del año anterior y también damos a conocer los desafíos que tenemos para el año en curso.

En el dinámico escenario en el que nos movemos, donde muchas veces la contingencia se vuelve una protagonista de nuestra agenda, existen ciertos ejes de nuestra labor que destacan gracias al trabajo colaborativo que hemos realizado junto a diversos actores de la región.

En este ámbito nos enorgullece, por ejemplo, el espacio denominado “Mesa Ciudades”, que fue impulsado por el gremio desde el 2017, y que está compuesto por autoridades locales, la academia y la sociedad civil. En él, se han logrado grandes acuerdos y se han presentado iniciativas como el estándar que necesitamos para la construcción de los atraviesos oriente – poniente para nuestra capital regional, como obras complementarias comprometidas por el MOP en la construcción del bypass de Talca. Nuestras imágenes objetivo de estos proyectos fueron tomadas en consideración por la Dirección Nacional de Concesiones y hoy con alegría y convicción podemos decir que el trabajo colaborativo da grandes frutos.

Dentro de los logros del año pasado también cabe destacar, que a través de nuestras empresas socias, durante el 2023 logramos entregar más de 16 mil atenciones sociales a nuestros trabajadores, trabajadoras y sus familias, lo que se traduce en beneficios concretos en áreas como salud, formación, vivienda y cultura entre otros.

Asimismo, en Vivienda podemos decir, con mucha esperanza, que nos acercamos a cumplir la meta del Plan de Emergencia Habitacional en el Maule, lo que para nosotros es un incentivo que nos impulsa a seguir trabajando con el sector público para acercarnos hacia el déficit habitacional cero.

Por otra parte, el trabajo llevado a cabo en nuestras diversas instancias gremiales para acercar a los estudiantes de liceos técnicos de nuestra región a las empresas y a las
actuales necesidades del sector, también es un desafío en el que hemos avanzado con firmeza, logrando prácticas en terreno, charlas motivacionales, aportes a
las instituciones de formación, entre otros.

A pesar de estos logros, no podemos ignorar los desafíos que aún enfrentamos. Por ejemplo, el desarrollo urbano y una mejor infraestructura requieren atención continua, ya que debemos revitalizar nuestros espacios públicos, en especial en nuestros cascos históricos, para mejorar la calidad de vida de nuestros ciudadanos.

En este camino hacia el progreso, también es crucial reconocer y valorar el papel fundamental de la mujer en la industria de la construcción. En esta misión hemos trabajado con firmeza y presenciado un aumento significativo en su participación, tanto en roles de liderazgo gerencial y gremial como en la fuerza laboral en general. Este avance refleja
nuestro compromiso con la igualdad de género y el empoderamiento femenino. Debemos seguir fomentando la inclusión y relevar a las mujeres en nuestra
industria, reconociendo su valioso aporte para nuestro desarrollo y crecimiento.

Asimismo, si bien hemos avanzado en áreas como la seguridad laboral aún persisten retos significativos que debemos abordar con determinación, por ejemplo, debemos continuar formando líderes en esta materia tanto para nuestras obras como para nuestros centros de trabajo, en los que se desempeñan día a día nuestro más valioso capital:
nuestros trabajadores y trabajadoras.

A su vez, debemos seguir impulsando la innovación y la sostenibilidad en nuestras prácticas de construcción, para enfrentar desafíos como el cambio climático y el aumento de la productividad, garantizando un desarrollo sustentable para nuestra región, entre otras muchas metas por delante.

Lo cierto es que al celebrar nuestros avances y afrontar nuestros desafíos estamos forjando un futuro prometedor para el desarrollo de nuestras ciudades y la calidad de vida de los habitantes en el Maule. Nuestra hoja de ruta es clara: continuar trabajando juntos con visión de futuro, responsabilidad y un firme compromiso con la
inclusión de la mujer en nuestra industria. El éxito está en nuestras manos cuando trabajamos unidos hacia un objetivo común ya que somos unos convencidos de que la construcción de mejores territorios es tarea de todos.