Atacama: Proyecciones económicas, nudos críticos y obras de construcción

Un complejo panorama desde un punto de vista económico para Chile en 2023 proyectó el Banco Central (BC) en su último IPoM, vislumbrando una caída del Producto Interno Bruto (PIB) en un rango de entre -0,75% y -1,75%, lo que está en línea con los datos de inversión informados por la Corporación de Bienes de Capital y las expectativas empresariales.

A este escenario, que según la presidenta del BC, Rosanna Costa, podría tener su peak durante el primer trimestre del próximo año, se suma una persistente inflación -que lograría converger hacia su meta del 3% en 2024- y factores estructurales, como nudos críticos o trabas burocráticas que afectan especialmente la productividad.

Por su lado, los efectos de la pandemia, incluyendo la inflación y el quiebre de cadenas logísticas, han tenido un fuerte impacto en nuestro sector, que es clave para el crecimiento económico y el trabajo -a nivel regional representa el 10% del PIB y el 8% del empleo-. Las alzas de los valores de los materiales -algunos de los cuales han experimentado variaciones anuales de hasta un 40%- han puesto en riesgo la ejecución de importantes proyectos.

El Gobierno, gracias a un trabajo en conjunto con el sector privado, ha reconocido esta situación extraordinaria. Por lo mismo, el Ministerio de Vivienda, en primer término, ajustó los valores de varios de sus contratos, y posteriormente el Ministerio de Obras Públicas ha seguido el mismo camino. De ahí la relevancia de que partidas presupuestarias como el Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) -que dependen de la Subdere y que fortalecen la gestión de los Gobiernos regionales permitiendo una labor coordinada con las municipalidades- también puedan avanzar en esta línea, tomando en cuenta que posibilitan la ejecución de iniciativas -en áreas como salud, educación o espacios públicos- de alto impacto local y social.

En definitiva, es sumamente importante que los programas que dependen de diversas entidades públicas puedan reajustar sus valores reconociendo la nueva realidad que enfrentamos como país y especialmente como región, para que obras largamente esperadas por la comunidad no sigan postergándose, sino que efectivamente se vuelvan una realidad.

Juan Pablo Hinojosa Usaj
Presidente CChC Atacama