La CChC Punta Arenas lanza “Escuela de Capataces”

30 / 08 / 18
Desayuno_ETC_web.jpg Desayuno_ETC_web.jpg

La CChC Punta Arenas, a través de la Escuela Tecnológica de la Construcción (ETC), organizó un desayuno donde socios y encargados de Recursos Humanos de empresas socias conocieron a profundidad la “Escuela de Capataces”, programa de capacitación dirigido a los actuales capataces que quieran estudiar la carrera Técnico en Edificación en Inacap.

La “Escuela de Capataces” consiste en la preparación de capataces o futuros capataces, a través de un plan de formación de siete asignaturas con un alto contenido práctico repartidos en 340 horas: Introducción a la Construcción (20), Taller de Construcción (40), Materiales de la Construcción (50), Topografía de Obras (60), C.A.D (50), Taller de obras (60), e Instalaciones Hidráulicas (60). Estas asignaturas se agrupan en tres módulos, los cuales tienen carácter de diplomados: Diplomado en fundamentos de Edificación, Diplomado de interpretación de planos planímetros y altimétricos, y Diplomado en supervisión y control de obra gruesa e instalaciones hidráulicas.

Luego de haber adquiridos diversos conocimientos, los estudiantes pueden rendir la evaluación de Reconocimiento de Aprendizajes Previos (RAP) y así optar a la continuidad de estudios superiores en la carrera de Técnico en Edificación en INACAP.

“Es un programa muy interesante que queremos implementar en la región de Magallanes. Consiste básicamente en darles la oportunidad a los trabajadores de la construcción, en cualquier especialidad, para que puedan tomar asignaturas y tópicos del Plan de Estudios articulado de Inacap para la formación, y luego el trabajador podría convalidar estas asignaturas con el programa de Técnico en Edificación de Inacap y seguir sus estudios y finalmente obtener un título técnico profesional”, indicó Manuel Correa, Director de Carrera del Área Construcción de Inacap Punta Arenas.

La Escuela de Capataces está dirigida a los trabajadores de obra de las empresas asociadas a la Cámara Chilena de la Construcción, teniendo como objetivo entregar una formación integral que permita un crecimiento personal y laboral.

“Nuestro objetivo como ETC es crear productos de formación y perfeccionamiento que permitan preparar trabajadores de alto nivel para el sector de la construcción, rompiendo paradigmas metodológicos, comerciales y sociales que impiden tener a la capacitación como un valor, tales como la duración de los cursos, los espacios de aprendizaje, los costos y la participación de las empresas”, indica Claudia Oyarzo, Consultora Zonal Sur Austral de la Escuela Tecnológica de la Construcción.

Para entrar a la Escuela de Capataces de la ETC e Inacap, se debe ser tener la Enseñanza Media completa y ser trabajador con contrato vigente con una empresa socia CChC, ser subcontratado de empresa socia CChC, o ser cesante desvinculado de empresa socia CChC.

La Escuela de Capataces se cofinancia entre franquicia tributaria y becas que otorga la CChC, es decir, por cada trabajador que la empresa financia con franquicia otro trabajador será financiado con becas CChC. En términos prácticos, la ETC le pagará $3.000 por cada jornada de capacitación asistida a cada trabajador que participe del programa por concepto de locomoción. Por otro lado, aquellos trabajadores que deseen realizar curso y se inscriban de forma directa sin patrocinio de la empresa que contrata o de la cual fue desvinculado, deben pagar $15.000 por cada módulo, por concepto de matrícula.

Escuela de Oficios: certificarse a través de ChileValora

Otro programa de la Escuela Tecnológica de la Construcción es la Escuela de Oficios, a través de la cual el trabajador de la construcción puede ingresar a cursos de 80 horas con el fin de perfeccionarse en su oficio actual o especializarse en un segundo oficio relacionado con la construcción, como por ejemplo pintor, carpintero de obra grueso, instalador eléctrico, ceramista, rigger, enfierrador, jefe de obra, albañil, concretero o trazador.

La Escuela de Oficios incluye la posibilidad de certificar las competencias laborales a través de ChileValora, reconociendo formalmente los conocimientos, capacidades y aptitudes de los trabajadores para ejecutar funciones específicas.