Índice de la Construcción regional en Aysén completa once meses a la baja

-4,3% fue el indicador para agosto de 2017

Índice de la Construcción regional completa once meses a la baja

Por onceavo mes consecutivo, la actividad regional de la construcción (Inacor) se mantiene a la baja. Es así como para el mes de agosto, el índice arrojó un -4,3% de variación, cifra que es consecuente con la realidad nacional.

El Inacor es elaborado de manera mensual por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), y mide el despacho de cemento, la contratación de mano de obra y la aprobación de permisos de edificación, teniendo por base las mediciones propias del gremio y datos aportados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).

Para Héctor Rodríguez, presidente de la CChC Coyhaique, esta cifra da cuenta “del retroceso que ha experimentado nuestro sector. En nuestra región la cifra continúa siendo negativa a pesar de los proyectos privados y estatales que se han levantado y claramente es algo que nos preocupa. Eso sí, existen mejores expectativas para el año que viene las que esperamos puedan comenzar a verse reflejadas en una mayor contratación de mano de obra, en la otorgación de permisos de edificación y en el despacho de materiales de construcción, específicamente cemento, a nuestra región”.

Cabe consignar que el índice de la construcción para el mes de julio en la región de Aysén fue de -4,4%, mientas que en agosto fue de -4,3%, lo que representa una leve mejoría. En cuanto al resultado acumulado para 2017, la cifra es de -5,4%.

Cifra país

En cuanto al índice de la actividad de la construcción nacional (Imacon), este presentó un retroceso de 4,1%, sumando doce meses a la baja.

Sergio Torretti, presidente de la CChC, sostuvo que “un año con cifras negativas en la construcción es un claro reflejo de que la pérdida de consensos respecto de las bases para seguir creciendo como país nos ha afectado profundamente. No solo a los constructores, sino a todos porque la construcción de menos proyectos de inversión es menos productividad, menos empleo, menos oportunidades y menos confianzas en el futuro. Por eso ahora se deben volver a construir grandes acuerdos en pro del desarrollo, donde la alianza público-privada es central”.