Columna de opinión | PGU: la preocupante medida que podría afectar el acceso a la vivienda

25 / 01 / 22
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Por: Lorenzo Dubois, presidente del Comité de Vivienda de la Cámara Chilena de la Construcción Temuco.

¿Cómo nos hacemos cargo de dar respuesta al legítimo deseo de mejorar y asegurar las actuales y futuras pensiones sin afectar en otros planos a las familias vulnerables de nuestro país?

Hoy está instalado en nuestro país la legítima y trascendente discusión sobre el financiamiento de la Pensión Universal Garantizada (PGU), iniciativa que pretende entregar un aporte máximo de $185.000 a todos los adultos mayores de 65 años que no se encuentren en el 10% más rico de la población.

¿Cómo se ha propuesto financiar una medida cuyo costo fiscal asciende a 3 mil millones de dólares hacia el año 2034, que equivale, por ejemplo, a la construcción de 50 hospitales como el de Padre Las Casas?

El proyecto del Ejecutivo propone, entre otras medidas, la eliminación del Crédito Especial a las Empresas Constructoras (CEEC) en las ventas exentas de IVA de los inmuebles adquiridos por beneficiarios de subsidios habitacionales, lo que, según estimaciones de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), aumentará el valor de las viviendas en un 12%. Es decir, una propiedad cuyo valor actual es de 2 mil UF sufrirá un alza en su valor quedando en 2.240 UF aproximadamente, afectando a cerca de 50 mil hogares anualmente.

La eliminación del CEEC impactará directamente en las viviendas con subsidio que, al tener precios de venta máximos limitados por los decretos de la política habitacional, no tienen forma de compensar este mayor costo a través del precio de venta, y así también a los subsidios para proyectos de fondo solidario fijos. Según la CChC, ello reducirá preocupantemente la oferta de viviendas, en especial las dirigidas a las familias más vulnerables, que es donde se concentra actualmente el déficit habitacional.

Por otra parte, en el caso de las viviendas sin subsidio, impulsará el aumento de precios, concentrando la oferta en viviendas de mayores valores, afectando la demanda. Un aumento de 225 UF del monto del crédito hipotecario hace que el dividendo mensual aumente $30.000, aproximadamente, lo que implica cerca de $120.000 más de ingresos del solicitante.

Esta situación se sumará, además, a la crisis en el alza de precios generado por el aumento en el costo de los materiales y la falta de mano de obra provocado por la Pandemia durante los últimos dos años.

Debemos contemplar que en marzo comienza la instalación del nuevo gobierno del presidente electo, Gabriel Boric, una de sus principales propuestas para hacer frente al déficit habitacional -que propone la construcción de 65 mil viviendas por año- podría verse afectada.

En vista de este preocupante escenario, desde la CChC proponemos, en el caso de viviendas con subsidio (DS49, 19 y 01) reconocer el mayor costo de construcción en el precio del inmueble y compensar a los compradores con un mayor subsidio.

En el caso de las viviendas sin subsidio implementar una garantía estatal al pie de la primera vivienda, permitiendo así la entrega de un crédito adicional, por parte de las instituciones financieras, con el respaldo de este “pie garantizado” hasta totalizar el 95% del valor de la vivienda.

Consideramos que estas medidas permitirían apoyar a miles de familias anualmente, especialmente emergentes y de clase media.