Cámaras regionales de la CChC entregan apoyo para enfrentar la emergencia en Ñuble, Biobío y La Araucanía

09 / 02 / 23
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Frente a este a esta emergencia que ha dejado hasta el momento 343 mil hectáreas consumidas por el fuego, la Cámara Chilena de la Construcción ha desplegado su ayuda, a través de las diferentes cámaras regionales del país.

Un claro ejemplo del despliegue que está teniendo el gremio en las regiones fue lo ocurrido en la CChC Araucanía lugar en el que se realizó una donación de maquinaria, 28 toneladas de agua, 310 pares de zapatos de seguridad, 850 planchas de zinc, 20 estanques de agua de 1.000 litros, 600 pares de guantes de trabajo, además de palas, martillos, serruchos y clavos como aporte para las tareas de limpieza y reparación de lo destruido.

En Concepción, los socios y socias han colaborado con un cargador frontal, una excavadora, camiones, retroexcavadora con operador, además se le entregó a la comunidad y a bomberos de Santa Juana aguas, bebidas isotónicas, mascarillas, antiparras, guantes, caretas, barras de cereal, frutas, entre otros insumos.

En Chillán, se han realizado más de 20 pozos en la ribera del río Ñuble e Itata, para abastecer a los helicópteros que combaten el incendio forestal en la zona, hasta la fecha se continúa trabajando en eso. Además, los socios y socias han aportado a la Dirección General de Aguas (DGA), Municipios, MOP y Gobierno Regional con retroexcavadora, camión aljibe, grúa horquilla, motoniveladora y camiones ¾.

Por otro lado, en la CChC Los Ángeles, se donó un estanque de seis mil litros, una motoniveladora y se aportó con un camión para los traslados, además de dos bulldozers, una retroexcavadora y una motoniveladora.

En Talca los socios y socias aportaron con dos camiones aljibes para Ninhue, comuna ubicada en la Región de Ñuble.

Desde el inicio de la crisis, se activó el convenio con la empresa Komatsu para el envío de excavadoras que han ayudado en las labores de despeje en las regiones de Ñuble y Biobío.

En el caso específico de Ñuble, se trabajó en un pozo de agua destinado a ayudar a los brigadistas a cargar aviones y helicópteros para el combate de los incendios.