Recogen las experiencias de China para promover la vivienda, la infraestructura y el desarrollo económico

A fines de mayo el primer ministro chino, Li Keqiang, visitará Chile en el marco de su gira por América Latina, lo que marca la presencia de uno de los líderes más importantes del mundo en una zona con amplio potencial para las inversiones del gigante asiático, ya que sólo en 2014 desembolsaron US$99 mil millones, convirtiéndose en socios estratégicos.

Lo cierto es que la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), anticipando las buenas relaciones entre ambos territorios, organizó una gira por China donde el principal evento fue la Feria Internacional de Cantón, incluyendo -además- reuniones de trabajo en Hong Kong, Shanghai y Beijing. El presidente de CChC La Serena, Freddy Bermúdez, y el consejero nacional, Hugo Santuber, fueron los representantes regionales de la comitiva que conoció el desarrollo económico y el avance en temas como vivienda e infraestructura.

INFRAESTRUCTURA
“Es impresionante como en China ocupan los espacios, pues las autopistas tienes cinco niveles y ampliación de cuatro pistas por lado, maximizando el desplazamiento y agilizando la conectividad”, manifestó Bermúdez, quien también tuvo palabras para destacar el uso de ferrocarriles de alta velocidad. “Tener un tren bala es uno de sus principales atributos para unir las ciudades”, explicó.

Una de las grandes diferencias que tienen con nuestro país es la mirada a largo plazo, que permite convertir las obras en políticas de Estado. “Tienen planes de desarrollo vial con un horizonte de 30, 40 y 50 años (...) Esa infraestructura es la que permitió el crecimiento de China y responde por qué en Chile siempre estamos atrasados en las obras. Basta ver la doble vía de La Cantera, la que fue pensada hace una década y hoy, apenas entregada, ya está atochada. Lo mismo con el Eje Cisternas - Las Torres, que acaba de iniciar faenas y cuyo atributo pasa más por el aumento de flujo que por el aporte de superficie vial”.

La otra arista pasa por el vínculo público con grandes conglomerados que han logrado disponer de obras en el momento exacto. “China posee una apertura económica interesante, pese a su duro régimen político. El haber hecho alianza con empresas de prestigio internacional le permitió conseguir desarrollo, tecnología, conocimiento e innovación”, aseveró Bermúdez.

VIVIENDA
De los 1.400 millones de habitantes que tiene China, la mitad vive en las urbes y el resto en zonas rurales. Con porcentajes de crecimiento anual cercanos a los dos dígitos en las últimas dos décadas, la única manera de mantener esas tasas es promoviendo la migración campo - ciudad. “Para convertirse en la primera potencia mundial, se estima que sólo el 10% de esos 700 millones de habitantes rurales debe quedarse allí, mientras que el resto debe ver a la ciudad como su nuevo hogar”, indicó Bermúdez.

Para ello se trabaja en modelos de edificios capaces de albergar a los nuevos residentes. “A menor escala en La Serena - Coquimbo experimentamos la necesidad de implementar espacios para los nuevos vecinos que año a año llegan a la conurbación. Acá existen torres residenciales de 15, 20 y hasta 30 pisos y, a diferencia de años atrás donde la superficie era de 45 m2 con espacios comunitarios de cocina y baños, hoy el estándar ha avanzado. La política de la vivienda social se ha optimizado para dar seguridad y dignidad a las familias”, explicó el empresario.

DESARROLLO ECONÓMICO
Con reservas de 3,8 billones de dólares de divisas, el gigante asiático es hoy uno de los principales financistas del mundo, donde -incluso- el Banco de Desarrollo de China presta más recursos que el Banco Mundial. Pero no se han quedado de brazos cruzados, ya que quieren que su influencia no sólo sea en Asia, América Latina o África, sino que también a Europa, por ello crearon otras dos entidad financieras, el Nuevo Banco de Desarrollo con un colchón de US$100 mil millones y el Banco Asiático de Infraestructura que tiene como principal objetivo financiar los US$40 mil millones que cuesta la mega carretera que unirá Asia con Europa y denominada “Ruta de la Seda”.

“Esto va de la mano con la propuesta gremial que le hicimos al Gobierno cuando asumió en marzo de 2014 sobre la creación de una Agencia Nacional de Infraestructura que sea capaz de gestionar recursos, tener autonomía y personal calificado para concretar iniciativas de esa índole”, estableció Bermúdez, quien recordó las seis décadas que lleva como “idea” el túnel de Agua Negra y los tiempos de espera de las grandes obras pensadas para la región.