Reforma para todos

16 / 04 / 15

El 29 de diciembre del año pasado el Gobierno envió a la Cámara de Diputados el proyecto de ley que “moderniza el sistema de relaciones laborales, introduciendo modificaciones al Código del Trabajo”.

Luego de un extenso análisis de los contenidos de esta iniciativa, estamos seguros que la reforma laboral generará un impacto negativo de manera transversal en todo el país, lo que también incluye a las empresas y trabajadores de la construcción.

La reforma no ayuda a abordar el mayor desafío que tenemos como país, que es profundizar el mercado laboral en jóvenes y mujeres. Especialmente preocupante son dos medidas que incluye la reforma, como “la titularidad sindical” y la “extensión de los beneficios negociados por el sindicato”.

Éstas medidas comparten un objetivo común: avanzar hacia un régimen de sindicalización forzosa al entregar a los sindicatos el “monopolio” de la negociación colectiva, independiente de su representatividad, y dotarlos de la posibilidad de “discriminar” entre trabajadores afiliados y no afiliados.

A los trabajadores se les restringirá su garantía constitucional de libertad individual, por no tener otra posibilidad que sindicalizarse para negociar colectivamente. Y también habrá menos oportunidades laborales, en especial las personas sin experiencia.

Mientras que los empleadores verán limitado su derecho de propiedad, ya que pierden capacidad para asignar el patrimonio de su empresa y, en el caso de los empleadores vinculados a la construcción, tendrán mayor incertidumbre al participar en licitaciones de obras.

Si realmente queremos retomar el camino del desarrollo es necesario considerar las visiones de los diversos sectores de la sociedad, para así tener un mejor país con más oportunidades, pero sobre todo con más empleo, porque creemos que construir Chile es obra de todos y con todos.

Valentín Cubillos

Presidente

CChC Arica

La reforma laboral generará un impacto negativo de manera transversal en todo el país.