Una mirada verde

Muchos serenenses y coquimbanos con más de cinco décadas en el cuerpo recordarán que uno de los parajes que acompañaba el trayecto entre ambas ciudades eran frondosas vegas donde las distintas tonalidades de verde destacaban, haciendo juego con el azul del mar y erigiéndose como un simbolismo puro de nuestra incipiente conurbación. Sin embargo, los tiempos han cambiado y el desarrollo nos ha hecho derivar en nuevas instalaciones residenciales para contener a la gran cantidad de personas que eligen venirse a vivir a la zona.
Esta semana el Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la UC confirmó la disminución de áreas verdes en Santiago, La Serena y Concepción, debido al crecimiento de las ciudades y la ocupación de nueva infraestructura residencial y de conectividad. Esta situación, lejos de eludirla, la enfrentamos y queremos contribuir a mejorar la calidad de vida de nuestra gente.
Si bien es cierto el auge inmobiliario en la zona costera ha derivado en más edificios, también como gremio hemos sido claros en nuestra postura ante los socios para que entreguen planes de mitigación e implementación de áreas verdes, de manera de dotar de más y mejores lugares de esparcimiento y entretención para los futuros residentes. Esto, dentro de los márgenes que nos permite la legislación.
Prueba de ello es el éxito de algunos proyectos inmobiliarios con amplia variedad de sectores comunes que se traducen en plazas, huertos, espacios para deportes, plazoletas y jardines. El cliente valora que se le den opciones de estar en un ambiente natural. Asimismo, el aporte inmobiliario ha permitido que en muchos de esos lugares -antes baldíos- hoy se dispongan de áreas de especies nativas que poseen un riego y mantención asegurados, pese a la sequía.
Como CChC y con nuestras empresas socias estamos comprometidos con mantener la calidad de vida, pues es uno de los atributos que nos diferencia de nuestros competidores. De allí que llamemos al Estado a generar una alianza público - privada para disponer de más espacios de área verde, ya que no es posible que el sector alto de Coquimbo tenga menos de 1 metro cuadrado por habitante, mientras que otros lugares, como el centro de La Serena, llega a 58 m2 (Fuente: Cehu, 2011).
Somos parte de la estrategia de superar esa desigualdad y desde ya nos comprometemos a mejorar nuestros productos y servicios inmobiliarios para recobrar ese característico verde que nos acompaño a fines del siglo pasado.