El líder que se espera para Codelco: Una mirada regional

El nombramiento del nuevo Presidente Ejecutivo de Codelco es un tema que no deja indiferente a nadie, menos a los empresarios y trabajadores que vivimos y aportamos con nuestro trabajo al crecimiento y desarrollo de Calama. Tanto el Directorio como el nuevo Presidente Ejecutivo, debieran estar conscientes que Codelco tiene problemas pendientes con las regiones y actuar en consecuencia.

Como gremio, compartimos la idea de muchos sectores que la nueva autoridad y su equipo ejecutivo debe tener la capacidad para proyectar el negocio minero y dirigir el capital humano con que cuenta, para asegurarles a los chilenos la sustentabilidad de la Corporación. Es requisito básico para comandar los destinos de la empresa más importante del Estado chileno, revisar su capacidad técnica, su situación económica, su proyección de largo plazo, su financiamiento, su operación y desarrollo en armonía con las regiones donde operan sus Divisiones.

De partida, debiesen restablecerse las confianzas con las comunidades regionales, reconociendo las problemáticas existentes y haciéndose cargo de los excesos cometidos tras el objetivo de mejorar la imagen corporativa en términos de costos para, de esta forma, reestablecer los mecanismos de diálogo y la construcción de acuerdos, tanto con la comunidad como con las empresas locales, generando una base para a futuro concretar conjuntamente las transformaciones que requiere la compañía más importante de nuestro país.

En los tiempos actuales, la nueva autoridad debiera llegar con una mirada que fomente la regionalización y la descentralización. Una nueva política regional y un nuevo trato con las comunidades locales por parte de Codelco, serían iniciativas bienvenidas por la comunidad calameña. El ejercicio regional de la responsabilidad social, la descentralización de las compras de obras y servicios, la regulación del poder de mercado, la productividad y el agregado de valor de las empresas locales, son temas sobre los cuales se debieran abrir conversaciones a nivel local.

Lo mismo debiera pasar con decisiones como los turnos especiales, que no sólo están convirtiendo nuevamente a Calama en una ciudad dormitorio, sino que de paso no alivian el problema de costos, no aportan a la calidad de vida que se dice promover y tampoco respetan la legalidad vigente.

Otro importante desafío del nuevo Presidente Ejecutivo será volver a promover las licitaciones abiertas, formales y transparentes que permitan a las empresas locales competir en igualdad de condiciones con sus pares foráneas. Para ello será necesaria una mayor apertura y transparencia en los procesos de licitación, que termine con el tinte centralista que se vislumbró en las últimas administraciones, como también una nueva política de contratos que respete a las empresas contratistas locales.

Finalmente también será tarea de la nueva autoridad corporativa, compartir las proyecciones de largo plazo de la Corporación en las regiones donde operan sus Divisiones, los proyectos mineros y sus producciones, junto con la participación regional en los empleos y la provisión de bienes, obras y servicios, entre otros; información relevante para la sustentabilidad de Calama y para la toma de decisiones de los que vivimos en ella.

Luis Farías

Presidente

CChC Calama

Será tarea de la nueva autoridad corporativa compartir las proyecciones de largo plazo de la Corporación en las regiones donde operan sus Divisiones.