Antofagasta no necesita más golpes a la vivienda y a la clase media

Este es el gran “frenazo” para el desarrollo inmobiliario de Antofagasta, producto del dictamen de Contraloría que ratifica el generado por el Minvu, sobre la limitación de construcciones en altura. Hecho que si bien tiene una aplicación administrativa correcta, deja en evidencia una vez más la obsolescencia de la única y más importante herramienta de planificación territorial que tiene la ciudad: su Plano Regulador.

Hasta ahora, ni autoridades ni la comunidad han sopesado los alcances de su aplicación, que afectarían directamente a 16 proyectos inmobiliarios inmediatos, los que representan una inversión de $19 mil millones, entregan trabajo a 2.500 personas y dejan 1300 viviendas en estatus quo.

El primer análisis arroja que 775 hectáreas de Antofagasta se ven afectadas, pero aún no es posible saber el número de propietarios que no podrá vender sus terrenos ni cuantos proyectos nuevos se pueden sumar en terrenos de las otras comunas de la región.

Como gremio fuimos los primeros en alertar sobre el aumento de precios y la escasez de terrenos para edificar proyectos para segmentos medios y bajos. Y esto lo hacemos bajo la profunda convicción que nuestra ciudad no se lo merece, y porque junto con ser empresarios también somos ciudadanos y ante eso tenemos un compromiso que cumplir. Hoy el escenario es muy negativo y nos atrevemos a anticipar la llegada de la peor crisis para el rubro inmobiliario en la zona, aún mayor que el congelamiento experimentado tras el año 2008.

Estamos frente a decisiones territoriales, administrativas y políticas. La bomba de tiempo que ha significado la mala planificación urbana estalló en nuestras manos y es el momento de aunar voluntades, dejar atrás antiguas posiciones y no descansar hasta obtener un PRC que entregue condiciones sociales armónicas a la población junto con garantías y certezas jurídicas a los distintos proyectos que hoy se estudian.

Pero sin duda lo más importante es tener consciencia que este frenazo disminuirá el stock de viviendas, lo que conllevará un nuevo aumento en los precios, sumado esto a la no construcción de viviendas sociales, al incremento de los arriendos y al cambio de turno de las empresas mineras, la señal que como comuna podríamos seguir dando es… familias vivan en otro lado.
Jaime Tolosa Leiva

Presidente

Cámara Chilena de la Construcción Antofagasta

La bomba de tiempo que ha significado la mala planificación urbana estalló en nuestras manos y es el momento de aunar voluntades.