El futuro de nuestra conectividad

• Considerado el principal foco de congestión, según un estudio realizado por el gremio, la ruta 5 Norte, columna vertebral de la conurbación La Serena-Coquimbo, no cuenta con otra vía de conexión. La propuesta de la CChC regional es la concesión de la ruta y la construcción de caleteras laterales.

A riesgo de ser considerados majaderos  y motivados por el cambio de autoridades de todo nivel en nuestra región, queremos insistir en el tema de la conectividad de la Ruta 5 Norte, entre Coquimbo y La Serena. Recordar que el tramo El Panul hasta la trinchera de Alessandri, Juan Antonio Ríos hasta Suecia,  Gerónimo Rendic y Los pescadores, Huanhuali hasta la Avenida Francisco de Aguirre y los accesos al sector Las Compañías, se encuentran sin solución.

Todos los habitantes de ambas comunas lo sufrimos diariamente y para qué decir durante la temporada estival.  Conscientes de esta situación,  Vialidad tiene varios de estos tramos en diversas etapas de estudio, que son: prefactibilidad, factibilidad, pre diseño, ingeniería, licitación y la obra misma. Este proceso demora entre siete y diez años… ¡así de simple! A modo de ejemplo, tenemos el cruce Francisco de Aguirre, que ha avanzado un largo camino y que solo estaría operativo en el año 2018, siempre y cuando no surjan imprevistos entremedio. Los costos de estas obras no son menores y es imposible que sean abordados con los recursos fiscales o regionales en forma simultánea; por lo tanto, algunas de ellas son abordadas en etapas durante su ejecución.

Nuestra inquietud ante lo anteriormente expuesto es que no podemos esperar veinte o treinta años para tener solucionado totalmente este tema ¿Se imagina usted los tacos en cinco años más, en algunos de estos puntos? Y si a esto sumamos el considerable aumento del parque automotor, ¿qué ocurrirá con la incorporación, cada año, de cientos de vehículos a la circulación?  Es cierto que el SERVIU ha dado inicio a las expropiaciones del proyecto Eje Cisternas, que llegará hasta Sindempart en Coquimbo, pero esta será una vía urbana semaforizada  y que también tendrá un desarrollo larguísimo.  

Algunas voces se elevan, cada cierto tiempo, por la construcción de un by pass  en la conurbación,  pero ello solucionará los tiempos de viaje de los vehículos “que pasan” por la ruta en dirección al norte, que son menores en cantidad de los automóviles locales. No tenemos reparos para ello y, sin duda, es bueno recordar que este es el único tramo semaforizado de la Ruta 5 a nivel nacional, sin embargo, no soluciona nuestros problemas.

Cuando uno recuerda  que los empresarios españoles diseñaron y construyeron, en tres años, la doble vía entre Los Vilos y El Panul, con obras tan emblemáticas como los puentes El Teniente y el Viaducto Amolanas,  es muy difícil resignarse a esperar los ritmos de Vialidad. O cuando vemos la red de autopistas en la Región Metropolitana funcionando, con los reparos de los usuarios… pero funcionando.

Los habitantes de esta conurbación no son ciudadanos de segunda clase. Necesitamos soluciones ¡ahora! Entonces, el llamado es para los nuevos alcaldes, gobernadores e intendente, que en conjunto y a una sola voz, bien convencidos de que no hay otra solución que la concesión de este tramo y haciendo a un lado los temores o efectos en  popularidad, den la lucha ante las autoridades centrales para lograr la solución integral de este  problema que, a nuestro juicio, no es otra cosa que  la concesión de la Ruta 5 y la construcción —por parte del Estado— de las caleteras adyacentes.

Presidente Regional CChC La Serena, Alfredo Prieto Parra