Desafíos y Perspectivas: Evolución de la Seguridad Laboral en Chile

Por Claudio Ángulo Torres, presidente de la Comisión de Seguridad de la CChC Osorno

Publicada el día sábado 24 de febrero 2024 en el Diario Austral Osorno

El concepto y la percepción de la seguridad y salud laboral han experimentado una notable evolución en Chile a lo largo del tiempo, acompañando de cerca los cambios en la legislación. Desde la promulgación de la ley N° 3.170 en 1916 hasta la actual 16.744 del 1968, que establece normas sobre accidentes de trabajo y enfermedades profesionales, el país ha avanzado significativamente en la protección de los trabajadores.

Es innegable que Chile se destaca en la región por sus indicadores de seguridad laboral, especialmente en lo que respecta a la accidentabilidad y la siniestralidad. Sin embargo, ¿podemos aspirar a alcanzar los estándares de los países desarrollados? Esta pregunta nos lleva a reflexionar sobre los aspectos en los que aún podemos mejorar.

La respuesta a esta interrogante es multifacética. Es evidente que se requiere una mayor fiscalización para garantizar el cumplimiento de las normativas vigentes. Asimismo, es fundamental el compromiso de los trabajadores y trabajadoras con su propia seguridad, así como el de las empresas en la implementación de todas las medidas necesarias para prevenir accidentes y enfermedades profesionales.

En este sentido, la coordinación y el diálogo entre todos los actores involucrados son clave. La implementación de sistemas de gestión en materia de seguridad y salud laboral, la formación y funcionamiento adecuado de los comités paritarios, y la creación de mesas de trabajo entre los distintos gremios y las autoridades fiscalizadoras son algunas de las herramientas disponibles para avanzar en esta dirección.

Es importante recordar que la seguridad laboral no solo implica la ausencia de riesgos, sino también la promoción de un ambiente de trabajo saludable y protector. Según la Real Academia Española, la seguridad puede considerarse como un estado de ausencia de peligros y condiciones que puedan provocar daño físico, psicológico o material en los individuos y en la sociedad en general.

En definitiva, mejorar la seguridad y salud laboral en Chile es un desafío que requiere el compromiso y la acción conjunta de todos los actores involucrados. Solo a través del trabajo colaborativo y la implementación de medidas efectivas podremos seguir avanzando hacia estándares equiparables a los de los países más desarrollados en esta materia.