Puerto Barón: mucho más que un mall

19 / 03 / 13

Se dice que en la sociedad que vivimos el lenguaje construye realidades. Nada más cierto cuando de escenificar discusiones sobre proyectos de gran envergadura y de alto impacto en nuestras ciudades se trata, las que se realizan regular y casi naturalmente a través de los medios de comunicación.

Así ha venido ocurriendo con el caso del proyecto urbano Puerto Barón de la Empresa Portuaria Valparaíso (EPV), que busca recuperar el borde costero para la ciudad, su principal activo. Desde que fue presentado a la ciudadanía, su proceso de tramitación ha estado marcado por los ataques y las incomprensiones, a pesar de que la portuaria ha cumplido rigurosamente todas las condiciones y etapas que demandan la regulación vigente.

Y pese a que la opinión de la comunidad también ha sido tomada en cuenta, y que en general manifiesta un respaldo amplio a la iniciativa, ciertos sectores han tenido éxito en su empeño de reducir este proyecto la mera construcción de un centro comercial, como por lo demás lo han recogido también los medios.

En ese sentido la estrategia de sus detractores ha sido exitosa. Hoy se habla a todo nivel de la construcción del “mall”, despreciándose antojadizamente así los muchos beneficios que este proyecto representa para la ciudad y sus habitantes.

Se han dicho muchas cosas de él: que la vocación portuaria de la ciudad está amenazada, algo cuestionable si consideramos que detrás está la empresa portuaria más importante del país, compañía autónoma del Estado que cuenta con un directorio de alto nivel (y que también avanza en la licitación de un nuevo terminal de carga); se dice que va a quedar gente cesante, cuando sólo en su construcción trabajarán 1.500 personas y luego en su operación generará más de 2.500 empleos; que tapará la vista, cuando contempla más áreas verdes que todas las plazas de la ciudad juntas y un paseo peatonal de más de un kilómetro.

Además, no podemos perder de vista que esta es una región que se caracteriza por la infinidad de proyectos de todo tipo, que por diferentes trabas y circunstancias, naufragan en el camino y nunca llegan a ejecutarse.

Sin embargo recién tuvimos la buena noticia de que EPV traspasó los terrenos al concesionario, para comenzar las obras. De esta manera parece que por fin comienza a concretarse uno de los proyectos más emblemáticos de la zona. Una obra que promete cambiar la cara de la ciudad y devolver el mar a los porteños. Y que esperamos también sea una señal de un Valparaíso que se abre a recibir las inversiones que necesita en forma urgente, para recuperar su dignidad perdida y devolver la calidad de vida a sus habitantes.

Alejandro Vidal Planas
Presidente regional Valparaíso
Cámara Chilena de la Construcción

Una obra que promete cambiar la cara de la ciudad y devolver el mar a los porteños.