“Los APL empujan a nuestra industria a ser más sostenible, mejorando la calidad de vida de todos quienes habitan los territorios donde estamos presentes”

03 / 01 / 24
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Marisol Cortez, presidenta de la Comisión Nacional de Medio Ambiente de la Cámara Chilena de la Construcción, profundizó en la importancia de los Acuerdos de Producción Limpia (APL) para el sector de la construcción en Chile. Con una visión enfocada en cambiar el modelo constructivo de lineal a circular, Cortez resaltó cómo estos acuerdos están configurados para reducir significativamente los residuos sólidos, mejorar la productividad y llevar a la industria hacia un futuro más sostenible y respetuoso con el medio ambiente. Además, profundizó en los desafíos y oportunidades específicas que enfrenta Antofagasta en este camino hacia la sostenibilidad y cómo los APL están diseñados para adaptarse y beneficiar a esta región con características únicas.

¿Cuál es su visión general sobre el Acuerdo de Producción Limpia y por qué considera que es importante para el sector de la construcción en Chile?

Los Acuerdos de Producción limpia que estamos impulsando como gremio, tienen como objetivo cambiar el proceso constructivo de lineal a circular, donde hoy existe extracción de materias primas y recursos que serán cada vez más escasos y caros, también una baja productividad aumentando los costos de construcción. La forma actual genera el 34% de los residuos sólidos del país, que llegan a los botaderos produciendo una contaminación ambiental alta, con la consecuencia del deterioro de la imagen de la industria. Por ello es importante el cambio hacia una economía circular donde se inician los proyectos con integración temprana incorporando innovación, productividad e industrialización o prefabricación para desde un inicio en diseño tener menor cantidad de residuos, mejorando la calidad de los empleos y disminuyendo los costos, generando una industria más sostenible.

¿De qué manera cree que el APL contribuirá a la sostenibilidad en el sector de la construcción, especialmente en el contexto de Antofagasta?

Hoy Antofagasta, como también otras ciudades de nuestro país, no cuentan con lugares de disposición final adecuados y menos con lugares de tratamiento y reciclaje para poder reutilizar y o valorizar los residuos sobrantes de la industria de la construcción. Con un APL y con una mesa publico privada, se podrá avanzar en resolver los problemas de residuos que hoy contempla la ciudad con respecto a la industria de la construcción.

Considerando las características únicas de Antofagasta, ¿cuáles son los beneficios específicos que espera ver como resultado de la implementación del APL en esta región?

La implementación de un APL cumple cuatro objetivos generales, como la cuantificación y la trazabilidad , maximización de la valorización de los residuos, una adecuada vinculación de la cadena de valor, la que podrá ser implementada a la medida de los requerimientos de la ciudad de Antofagasta, avanzar en innovación en la industria de la construcción con beneficios importantes para la ciudad y la comunidad, y mejorar en las empresas de dicha ciudad los conocimientos en economía circular no solo de los supervisores sino también de los trabajadores de dichas obras.

¿Cuáles son los principales desafíos y oportunidades que anticipa al implementar el APL en la Cámara Chilena de la Construcción y en particular en Antofagasta?

Los desafíos que enfrenta un APL son tener una cantidad de empresas adecuada para poder comenzar a realizar cambios colaborativos, también tener una buena mesa publico privada que resuelva los desafíos específicos de la región. En cuanto a las oportunidades, Antofagasta debe ser un impulsor de los APL en la zona norte como piloto para otras comunas y regiones que tienen las mismas características climáticas y ambientales. Como CChC estamos siempre apoyando estas iniciativas, sabiendo la importancia de empujar a la industria a ser más sostenible, desde cualquier parte del país, considerando las particularidades que tiene Antofagasta y la importancia de avanzar en economía circular e innovación.

¿Cuáles son sus metas y expectativas a largo plazo respecto al APL dentro de la Cámara Chilena de la Construcción y cómo planea medir su éxito?

Las metas a mediano plazo es tener efectivamente empresas certificadas en las cuatro macro zonas del país (norte, centro, sur y sur austral), donde contemplan la particularidad de los territorios, para a largo plazo ser replicada a todo el país, teniendo un estándar en la industria del trato de los residuos de la construcción y demolición, buscando prevenir su generación y aumentar su uso como recursos, así como también considerar la eficiencia hídrica dentro del proceso.

¿Cómo planea involucrar y colaborar con los diferentes stakeholders, incluyendo a los miembros de la Cámara, para asegurar una implementación exitosa del APL?

La colaboración público-privada, dentro de ellos son el Gobernador, los municipios, las empresas, los gestores de residuos, los recicladores de base y los potenciales emprendedores de nuevos productos son fundamentales en esta cadena, los que deben estar debidamente coordinados, tanto para el proceso, como en reglamentos, leyes y ordenanzas, las que deben ser adecuadas para poder avanzar en la implementación de los diversos desafíos que se enfrenta en la implementación y posterior mantención del sistema de economía circular.

¿Hay lecciones aprendidas o mejores prácticas de otros sectores o regiones que se estén considerando para la implementación del APL en Antofagasta?

Se realizó un APL piloto en la región de Valparaíso hace 2 años donde hoy están en proceso de certificación las empresas. A partir de esta experiencia se generó un manual de residuos de la construcción como también cursos de capacitación para poder implementar de mejor manera los APL no solo en las obras sino también a los centros de trabajo, proveedores y a las oficinas de proyectos, ingenierías y arquitectura, ya que se requiere de toda la industria de la construcción y no solo de obras para una implementación completa. Como también de una mesa público-privada donde se levantaron los desafíos que contempla la región de Valparaíso. Estos desafíos deben ser evaluados específicamente en cada territorio con sus características particulares.

¿Cómo espera que el APL impacte positivamente en la comunidad local y el medio ambiente en Antofagasta?

El impacto local es uno de los objetivos prioritarios, no solo por aprender a separar, a valorizar, sino también a crear conciencia en la comunidad y en las empresas para comenzar a generar menor cantidad de residuos desde su origen realizando una integración temprana del diseño como también complementando con políticas públicas que incentiven estos nuevos procesos. Este nuevo APL también contempla la eficiencia hídrica, que es una condición importante para esta ciudad.

¿Qué papel juega la tecnología y la innovación en la implementación y el éxito del APL en el sector de la construcción?

La tecnología y la innovación como por ejemplo la prefabricación y la industrialización serán fundamentales para los cambios más profundos en la industria, no solo en productividad sino también en medio ambiente. Pero también traerá nuevas empresas con nuevos procesos constructivos adecuados y adaptados para la zona.

A medida que avanzamos hacia un futuro más sostenible, ¿cómo ve el rol de la Cámara Chilena de la Construcción y el APL en la configuración de ese futuro?

Los APL nos ayudan a tener una mirada más integral de las ciudades, no solo del proyecto, considerando la calidad de vida de los nuevos habitantes, también de su entorno, generando ciudades más amigables, con políticas claras para ayudar a implementar cada uno de los desafíos que contempla un APL. En particular, los APL generan el desarrollo de nuevos negocios donde los residuos se convierten en materia prima. También consideran un impacto positivo en la comunidad, optimizan la utilización de materiales y recursos, e integran a todos los actores de la cadena, empujando no solo a nuestra industria a ser más sostenible sino a todos los territorios donde se implementan mejorando la calidad de vida de sus habitantes.